COMADRONA INDEPENDIENTE

opiniones sobre parto natural que puedan guiar a las mujeres

Monday, December 17, 2007

SOBRE MODAS

Reconozco que generar una corriente de opinión es favorable para poder profundizar en cualquier tema, pero en muchos casos y en concreto a muchas mujeres, a veces, ello les ocasiona (y más todavía hoy en día) dificultades para ubicar su deseo.
Me explico por ejemplo al hablar sobre lactancia materna, esta bien lo que ocurre en la actualidad: es generalizada la idea de que la leche materna es la mejor alimentación para un bebé humano (hay miles de razones: somos mamíferos, alimento vivo y personificado, barato, sin intolerancias,......) pero de eso a que sea real la prevalencia de la lactancia materna a los tres meses (ya no planteo a los 6, dada la incongruencia entre disponer una baja maternal de 16 semanas y promover lactancias hasta los 6 meses) sea tan elevada como prácticamente la obligatoriedad con la que se plantea el tema en el nacimiento hay un abismo.
Es decir ciertas mujeres necesitan corrientes de opinión para dejarse llevar por esa moda y no tomar decisiones, pero en nuestra vida, casi todo lo que hacemos hasta lo que parece que no se decide es una decisión y comporta actitudes, rituales, ritmos, dependencias, ... El pecho no es lo mejor, lo mejor es intentar dar pecho; se tendría que añadir cuando eso es una decisión consciente y libremente escogida. No quiero proponer con esto no dar lactancia materna, a mi personalmente no me parecen fantásticos los biberones, ni me he preocupado demasiado de el asunto de la lactancia artificial, pero lo que me preocupa es que las mujeres no tengan su deseo claro o que utilicen equívocamente ciertas corrientes de opinión y se confundan más que aclararse.

Dar el pecho no quiere decir, evidenciar una sexualidad en público, estar con el seno en disponibilidad constante, tanto de chupete, como de consuelo, como de alimento, centrar la vida personal en el bebé no dejando al padre capacidad de manejarse en la crianza,... quiere decir estar de guardia constantemente día y noche estando siempre disponible, aprender a manejarse en otros tiempos relacionados íntimamente con el tipo de bebé y las coordenadas domésticas, poner el cuerpo en primer orden aceptando que la condición de mamíferos también es algo que requiere cierta elaboración. Por otra parte dar el pecho no significa retrasar la incorporación de otro tipo de alimentación cuando es necesaria y no presupone sacrificios y “streses” añadidos, es una opción llevada a cabo con gusto y placer, gratificante y no mortificante y muy vinculante, todo ello siendo lo más realistas posibles.

Monday, December 03, 2007

MISTERIO

Como una mujer puede estar de acuerdo en equiparar el misterio a lo que aún no se sabe hacer, es como si ya hubiésemos decidido o estuviéramos en condiciones de vivir en cierto nivel tan profundamente creativo que las palabras emergieran no para explicitar, sino para dar forma a otra realidad. Hubo un tiempo que se pensó que el tema debía apoyarse en el lenguaje matemático para acercarse a cierta realidad inaccesible de otro modo, último vestigio de cierta visión universal. Hoy en día donde la individualidad ajena a todo referente cada día ocupa más espacio en el discurso, es francamente difícil posicionarse en la defensa de cierto aspecto sagrado e interno.
La coherencia es intentar sentir, pensarse, expresarse y en lo posible actuar de un mismo modo pero como evidencia de cierto equilibrio y no como consecuencia de hacer lo que nos de la gana, cuando nos de la gana, pues hay tiempos para todo y hay muchos tiempos y estos no son iguales, homogéneos, no dependen de la hora del reloj. Hacerse mayor significa aspirar a algo más que un chupete, aceptar lo que viene y saber que en el devenir se esconde cierta sabiduría pero no olvidándose del cuerpo (en eso estoy totalmente de acuerdo) Cuerpo entendido como soporte carnal y como espacio personal íntimo donde todo se recoge y encuentra para una misma. Hay algo más allá de la tensión y la distensión que tenemos que vivir y aceptar y dejar fluir, cierto misterio que colma la existencia y que muchas veces en María Zambrano he podido encontrar en sus textos.

Hay cierto aspecto de la gestación, del gestar, del dar a luz que no puede explicarse, explicitarse, conocerse, controlarse, que sólo permite la entrega incondicional y que puede ser un viaje absolutamente particular de dimensiones inexplicables para la mujer que las vive, para su tiempo y para cierto “movimiento ambiental”.