COMADRONA INDEPENDIENTE

opiniones sobre parto natural que puedan guiar a las mujeres

Monday, January 16, 2006

Contradicciones profesionales o falta de reflexión

Apunte breve para señalar lo acontecido el sábado en un programa de radio 89,8 sobre parto natural (en el domicilio).
Sorpresa somos los únicos profesionales que desarrollamos actividades propias con ayuda doméstica!. Cuand0 se ha visto que cualquier profesión acuda a un medio de comunicación público a divulgar sus posibilidades y lo haga presentandose junto a la profesionalización de una red femenina de apoyo (brillante contraste: red de apoyo y profesionalizada).
No estaré nunca de acuerdo con que las comadronas perdamos nuestra energía en establecer puentes con la ideología y no con el sistema sanitario y con ello con las posibilidades de investigación científicas. Las mujeres deben ser libres de tener o no apoyos y de decidir quienes deben ser esos apoyos. Las comadronas no estamos para mediar en ese terreno. Nuestra mediación es con las propias mujeres y con las posibilidades asistenciales y terapeúticas donde es posible proponer nuevas vías para cubrir a todas las mujeres y sus posibilidades procreativas.
Sería más interesante empezar a trabajar en equipos multidisciplinarios y abrir nuevas puertas para poder acoger a todas las mujeres y sus coyunturas y no sesgar la tradicional imagén de la actividad de las comadronas a un terreno concreto, peculiar y no adecuado a su universalización.
Pero que le vamos a hacer esto es lo que hay.

Monday, January 09, 2006

investigaciones sobre el parto vaginal

Me gustaría hacer mención de dos artículos aparecidos en prensa. Uno muy reciente de "El País" (3 de Enero 2006) y otro aparecido en la revista MYS de comunicación interactiva editada por Caps en Otoño 2005.
El primero como el segundo son de investigaciones norteamericanas, de AJOG y de JAMA respectivamente.
En la primera el titular decía:"Animar a las parturientas a empujar apenas acorta el parto" Mi comentario es que han descubierto la sopa de ajo, pues esto las comadronas que trabajamos asistiendo partos naturales lo sabemos desde tiempos inmemoriales, lo que me da que pensar: ¿Puede ser que los médicos norteamericanos hagan este tipo de investigaciones porque no hay tradiciones de profesionales de la partería en Norteamerica? En cualquier caso es fácil deducir que si las comadronas desean hacer investigaciones para certificar la evidencia empírica es adecuado basarlas sobre la fisiología, pues se podría demostrar lo que ya se conoce y además añadir otras sugerencias. Es decir: "No sirve para acortar el parto, ni para el bebé, ni para el periné" Con lo que me permite meterme de lleno en el segundo artículo a comentar.
En la contraportada de la revista se haya la noticia: "La episitomia rutinaria es un riesgo innecesario que suscita más molestias y complicaciones a las mujeres en el puerperio y no evita la incontinencia" Y el artículo acaba: "Mantente firme si quieres evitarla". Y yo creo se tendría que matizar esta rotunda afirmación.
Es evidente que las comadronas estamos formadas profesionalmente para proteger (yo diría prevenir y rehabilitar también) el periné obstétrico pero...
A ver no todos los partos son iguales, ni los bebés tienen el mismo peso,... Es decir no es adecuada e incluso peligrosa la episiotomia rutinaria, pero a veces es necesaria una cierta episiotomia dependiendo de la distancia ano-vulvar del periné de la madre, de la flexibilidad del periné obstétrico o simplemente del conocimiento de la mujer de su tono muscular y de como abrirlo para acompañar al bebé en el nacimiento, y todo ello porque cada mujer y cada parto son distintos y se debe atender a esa diferencia.
Lo que me parece urgente y debería ser propuesto es el hecho de que las mujeres aprendan a controlar y a tonificar su periné y así puedan con razónes de peso llegar a pactos para cambiar tanto la posición de dar a luz, como la forma de acompañar al descenso del bebé en el período expulsivo del parto (es decir con expiraciones), como en la sistematización de las rutinas asistenciales. Otras opciones reivindicativas pueden no abrir vías y además generar hostilidades que no creo faciliten nada bueno ni a los profesionales ni a las mujeres que los necesitan.

Tuesday, January 03, 2006

Holanda la obstétricia vanguardista en crisis.

Así se podría titular la situación analizada del tema de los partos a domicilio de los registros para el 2003. (Imposible escribir en Diciembre se han ido acumulando cosas que han hecho imposible la puesta al día del blogspot)
Ha aparecido en prensa las conclusiones de la comisión formada por Asociación holandesa de Medicina Perinatal, la Fundación para el Registro Perinatal y el Colegio de Aseguradoras del ramo con unos resultados sorprendentes. Holanda mayor índice de muertes perinatales de Europa Occidental con 13,4 fallecimientos por cada mil bebés nacidos. Donde al menos ¡1 de cada 11 casos fatales podría atribuirse a la mala calidad de los cuidados recibidos por la madre! Como todo el mundo conoce Holanda es conocida por que la mayoría de la asistencia al trabajo de parto se realiza a domicilio (sea cual sea el domicilio). Parece que la mayoría de las muertes (38%) fueron debidas a problemas con la placenta y con la falta de celeridad de las comadronas o falta de reacción oportuna tanto de las usuarias como de los ginecólogos implicados. Noticia que da que pensar y rebate la corriente de máxima actualidad que afirma: "de que como es natural no hace falta criterios" o da a entender de que en el primer mundo como nunca pasa nada se puede hacer de más y de menos; pues va a ser que no, que esta información hace un llamamiento a una valoración de los límites y de los protocolos de actuación profesional en el tema del parto natural y a domicilio.
Siempre he defendido de que cada mujer es diferente, pero también me hubiera gustado desarrollar el debate sobre mínimos que aseguran la vida para madres e hijos en la asistencia domiciliaria, pero las discusiones de rivalidad entre los partidarios de una asistencia hospitalaria (sinónimo de altamente tecnificada) y los de la asistencia domiciliaria (practicamente arbitraria y contestataría) han hecho imposible el debate. Como siempre, es necesario que aparezcan noticias tan alarmantes para poner encima de la mesa la necesidad de reflexionar y replantear como se hacen las cosas, con que criterios y con que grado de flexibilidad. Leboyer hace muchos años y en su último libro "Parto: crónica de un viaje" ponía encima de la mesa el tema más peliguado de la asistencia obstétrica: el alumbramiento placentario. Odent últimamente plantea (alegando a las connotaciones mamíferas de nuestra especie) como se debería prevenir el tema. Pero en la realidad siguen apareciendo lagunas y momentos críticos para la vida de la mujer y su bebé, y desde mi criterio se tendría que tener en cuenta lo sucedido en todo el proceso porqué puede ser que analizado con otros ojos se pudiese ver cuales ingredientes de la receta individual van a incidir en el riesgo y el resultado perinatal y materno y ni que decir tiene que ello es complementario a la necesidad de revisar la actitud profesional ante los problemas del puerperio inmediato (escasamente valorado).
Quién me conoce sabe y lo he defendido muchas veces públicamente que creo que la obstétricia es un arte no solo por los gestos que la definen en la clínica sino porque cada vez más es mucho más compleja la asistencia a mujeres más exigentes, a veces más despistadas y con alto nivel de exclusividad en la vivencia. Las implicaciones, expectativas, condiciones de vida, esclavitudes personales y sobre todo las corrientes de pensamiento hacen que combinar la salud, la prevención, la satisfacción, la entrega y el crecimiento personal provoquen un coctel delicado para conseguir que sea digestivo, saludable y enriquecedor para todos los que participan en el tema de la procreación de nuestra especie. Feliz año 2006.